Mi casa, mi huerta: Técnicas de agricultura urbana
El manual sobre agricultura urbana sugiere algunas ideas, sobre todo, lo invita a crear nuevas tecnologías a la medida de sus posibilidades. La producción propia de alimentos ha cobrado relevancia pública en el mundo y constituye un compromiso con nuestro bienestar.
De acuerdo con la perspectiva de la Soberanía y Seguridad Alimentarias, la Agricultura Urbana comprende la producción de hortalizas, frutales y animales de granja a escala familiar y comunitaria.
Al evitar el uso de agroquímicos, esta actividad resulta sustentable y beneficiosa para el hábitat en general.
Asimismo, la producción de alimentos en la ciudad favorece el uso eficiente del agua, la energía y el suelo y ayuda a ahorrar energía.
El traslado de las verduras frescas desde puntos alejados causa elevados gastos de transporte y perjudica su conservación.
En esa línea, las huertas en contenedores también permiten reutilizar muchos materiales inorgánicos y orgánicos que suelen desecharse en los hogares.
Las huertas urbanas también podrían ayudar a aprovechar mejor el agua, evitar inundaciones, amortiguar el impacto de las altas temperaturas y construir un refugio natural para la flora y fauna autóctonas.
Y hasta, incluso, se presentan como un medio para recuperar los saberes de nuestros antecesores y compartirlos con las nuevas generaciones. De este modo, la producción de alimentos agroecológicos en nuestra casa significa que podamos ser responsables del sustento propio.
La autogestión es un valor muy preciado que el Pro Huerta multiplica día a día en cada una de las huertas escolares, familiares e institucionales del país. No obstante, los beneficios pueden ser muchos más.
Sólo hay que poner en práctica el contenido
Así es, ponerlo en practica.
Extraordinario manual para incentivar, promover y desarrollar actividades agrícolas en los espacios ociosos de nuestras casas.
Muy bien, a poner en practica. Saludos